Es 21 de marzo. Comienza la primavera entre lluvias y toca publicar portada: la quinta vez que lo hacemos, en esta ocasión ilustrada por José María de la Peña. Sí, eso significa que El Vuelo del Grajo cumple un año y lo vamos a celebrar por todo lo alto.
Cuando definíamos las líneas maestras de la revista, manejábamos conceptos e ideas como observación, emoción y conservación. También estudiábamos fascinados que era todo aquello del overland: viajar de la manera más autónoma posible, sin que nada te pueda parar, teniendo la capacidad de atravesar montañas, cruzar desiertos y vadear ríos, reduciendo al mínimo la dependencia de otras personas. Todo eso se cocía en nuestras cabezas mientras estábamos confinados. Y le añadimos la idea del “pajareo” o, mejor, del “animaleo”. “¿Y si nos fuéramos de viaje allá dónde nos diese el viento, con el único objetivo de ver bichos?” Un coche lo menos sucio posible, una tienda de campaña, una nevera, una cocina y millones de animales a los que conocer. Así nació el «pajareo-viajero» que, en un arranque de internacionalismo, cambiamos por birding-overland. Podríamos decir que durante este año de vuelo de la revista hemos estado poniendo a punto todo ello. Ahora toca dar el gran salto.
Marruecos: “¡Allá vamos!”
(Hoy la frontera y el tráfico marítimo entre España y Marruecos están cerrados. Están así desde que se declaró la pandemia, luego la política no ha ayudado a mejorar la situación y los últimos hechos -tan incomprensibles como inesperados- aún no sabemos cómo afectarán. Tenemos un plan B por si fuera necesario).
En febrero se anunció la apertura de fronteras para el día 31 marzo. El Ramadán empieza el 4 de abril y nosotros nos pondríamos en marcha el 9. Luego, veintiún días para recorrer lo más agreste del país norteafricano.
Para organizar el viaje, hemos consultado todas las fuentes a nuestro alcance, tanto de viajeros como de pajareros. Y así, apuntados sobre mapa plegable Michelin, tenemos marcados, con diferentes colores, casi cuarenta puntos de interés ornitológico y rutas, de más de 250 kilómetros de longitud, por zonas no habitadas por el ser humano y de las que no tenemos ningún registro de fauna, salvo los valiosos apuntes de distribución de mamíferos.
Los acantilados interminables del Atlántico, castigados por el incesante viento; el antiguo fuerte de Bou-Jerif, por el que se accede a la pista de Plage Blanche que lleva a Tan-Tan y que corre entre el océano y las dunas; el ibis eremita en el Souss-Massa y el búho moro en Merja Zerga; gacelas y zorro famélico en el desierto, más allá del Atlas; gorrión del desierto y fenec en Merzouga; las gargantas de Todra y Dadés; macacos de Berbería en los fríos bosques de cedros… ¡Son tantos los destinos y suenan tan bien en nuestros oídos!
Será un primer raid a Marruecos, que trataremos de contaros en próximos meses. Dejamos pendiente, entre otros lugares, el Alto Atlas y el Sahara Occidental.
Despegamos en este trimestre deseando que nos acompañéis en El Vuelo del Grajo. Os recordamos que podéis suscribiros al boletín de la página y seguirnos en nuestro canal de YouTube, página en Facebook e Instagram.
Pasad la mejor de las primaveras, haced planes gloriosos y recordad siempre: ¡Jarana y tira para el monte!